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  • Igualmente se encontr asociaci n s lida

    2018-11-13

    Igualmente se encontró asociación sólida entre el lugar de nacimiento de las medallistas y el nivel de escolaridad femenil. La relación es de 0.505 eukaryotic initiation factor un nivel de confianza de 99% de acuerdo a los datos de la encuesta inegi, Cuéntame 2015. Todas esas cifras indican que las comunidades más exitosas en el deporte son las que incluyen a ambos géneros en la práctica del mismo. Dicho valor se ve reflejado también en la correlación entre el lugar de nacimiento de las medallistas olímpicas y el total de medallas ganadas. La correlación es de .471 con un nivel de confianza de 99% (cuadro 1). Pese a la solidez de los argumentos respaldados por datos empíricos, la participación femenina en la organización directiva del deporte mexicano es limitadísima. El portal de empleo de la Secretaria de Educación Pública indica que sólo 23 de cada 100 profesionistas asociados al deporte o a la cultura física, corresponden a personal del sexo femenino. Eso explica mucho de las diferencias significativas entre hombres y mujeres en las preferencias deportivas. Las mujeres prefieren voleibol, yoga, “spinning” y “aerobics”. En el caso de los hombres se inclinan por el futbol soccer o americano, béisbol y karate. De otro lado, los hombres practican más deportes de contacto que las mujeres. Por último, son casi inexistentes, poco desarrollados, los deportes con participación simultánea de mujeres y hombres. Los casos señalados, ejemplifican la reproducción en el deporte de algunos estereotipos socialmente deformadores en el deporte. Si hombres o mujeres ven limitadas sus alternativas debido a prácticas estereotípicas se corre el riesgo de dejarles marginados, imposibilitándoles incorporarse no sólo a actividades deportivas sino a diversas actividades sociales. Nuestro tipo de práctica deportiva crea barreras que limitan las oportunidades de mejorar las capacidades físicas de hombres y mujeres. El arraigo de estereotipos es un círculo vicioso que atrapa a las personas y a sus posibilidades de elegir en libertad. “El trabajo al servicio del desarrollo humano va mucho más allá del empleo, pero el desarrollo humano también consiste en aumentar los rangos de elección de las personas y garantizar que tengan acceso a ribosomes más oportunidades” (). Hay, sin embargo, fenómenos esperanzadores. El principal reside en la creciente incorporación femenina al mercado de trabajo y a la educación universitaria que necesariamente tendrán que corresponderse con cambios paulatinos en la división familiar del trabajo y que rompen estereotipos. Se observan avances en la participación femenina en las especialidades de carreras y caminatas. Del mismo modo, en los últimos siete años, la afluencia de la población universitaria femenina en esos y otros deportes ha venido creciendo substancialmente (Figura 3).
    Conclusión
    La obra es resultado de un amplio y valioso trabajo colectivo donde se presentan y examinan a profundidad, por académicos e investigadores conocedores de los temas, los aportes al conocimiento en el ámbito de la ciencia, la tecnología y la innovación realizados por múltiples pensadores latinoamericanos y latinoamericanistas. A través de 12 capítulos valiosamente sintetizados, se rescatan los inicios y evolución del pensamiento latinoamericano en relación con el papel que la ciencia, la tecnológica y la innovación tienen en los procesos de desarrollo de las naciones; así mismo, el presente texto nos adentra en el cuestionamiento de si el llamado buscado y pretendido ¿es éste el pertinente para nuestra realidad latinoamericana?La primera parte del texto, bajo la temática de “La ciencia y la tecnología en el camino hacia el desarrollo” comienza con el análisis de las contribuciones al conocimiento del economista mexicano Alejandro Nadal, apartado en el cual se hace un recorrido por las etapas clave que definieron el cambio tecnológico en México, como el modelo de industrialización por sustitución de importaciones, el modelo de desarrollo neoliberal, la transición a la economía global y las ventanas de oportunidad del cambio técnico y científico para el desarrollo sustentable. El pensamiento de Alejandro Nadal se distingue por incorporar el carácter social al análisis de la ciencia y la tecnología presente en los países “periféricos” y por destacar la naturaleza “dependiente” de estas variables de impacto al desarrollo.